Por Pamela Álvarez Calderón B.
Confieso que estoy emocionada. ¡Emocionada y ansiosa… ya quiero que empiece… ya quiero ver el show de una de las fechas más pajas del año! Una de mis favoritas de todas maneras: PIPELINE!!! Así que voy a hacer un rewind mental para ustedes de cuando estuve por ahí hace algunos añitos atrás.
<<<<<<<<<< R E W I N D <<<<<<<<<< Pipeline 2017.
Cuando pienso en Pipeline pienso en arena color rojizo, en palmeras gigantes y en la sombra que producen sobre la arena. Pienso en arcoiris increíbles, pienso en sunsets con magia y también pienso en Acai bowls. Es que la primera vez que los vi y los probé fue allá en Pipeline (también comí un ceviche de pescado traído de Kauai que no tenía nada que ver con el nuestro, pero que estaba rico igual).
Pienso en ese mar… con el color más lindo, esa mezcla de azul, celeste y verde, en el que me bañé deli, ese mar que un día estuvo pasadazo y que otros, estuvo perfecto, ofreciendo la oportunidad de que los surfers se metan unos tubazos.
Pienso en el episodio del toldo… uy les tengo que contar esta historia. Pues resulta que uno de los días del evento, estábamos sentados en la parte de atrás de la arena, pegado a las casas. Nos gustaba ese lugar porque tienes más horas de sombra –por las casas de atrás y las palmeras- y porque si no hay nadie en alguna de las casas, puedes subir algunos escalones, de los que unen la arena con las terrazas de las casas, y ver el evento en altura. Top!
Estábamos felices ahí, y qué creen que pasó? Llegó un grupo de surfers y se pusieron a un costadito de nosotros y un poco más adelante. Dejaron sus cosas en la arena y se pusieron a armar un toldo. En un ratito el todo estaba armado y ellos, cómodos debajo de él. Acomodaron sus cosas y sus tablas y ya estaban ahí, listos! Qué tiene de especial esta historia? Pues que no eran surfers comunes y silvestres, eran todos los Pro australianos. Entre ellos estaban Mick Fanning, Owen Wright, Julian Wilson, Bede Durbidge, entre otros. Sí, ellos. Sí, a unos metritos de nosotros.
Al poco rato, se acercó alguien de la producción del evento y ¿qué creen? Les pidió que sacaran el toldo o que taparan la marca, porque tenía el logo de Hurley y como no era auspiciadora del evento, no podía tener exposición en esa zona de la playa. Y ¿qué creen? Al instante veías a Mick, Julian, Owen, etc. volteando la tela del tolo de la parte de arriba, para que quedara totalmente negra. Me dio risa todo ese episodio del toldo. Y sentí mucha suerte de haber estado sentada donde estuve y que coincidió con el lugar que ellos también eligieron para pasar ese día del campeonato. Era un buen lugar si ellos lo habían elegido también, ¿sí o no? Ahí pasaron todo el día. Iban por sus lycras al área de competencia cuando les tocaba correr, regresaban a recoger su tabla y desde ahí iban directo a la orilla para sus heats. El mejor lugar, sin dudas, para ver Pipeline, fue ese que escogimos. Nos ganamos con todos sus preparativos, cómo calentaban, cómo se ponían audífonos un rato antes de entrar al agua, cómo conversaban y se reían entre ellos, cómo era su relación con sus novias o las personas que los acompañaban. Tuvimos show no solo en el mar sino que tuvimos, delante de nosotros, una especie de backstage con los actores principales del show.
Cuando pienso en Pipeline pienso también en John John campeón del mundo por segunda vez, lográndolo en su casa, de local, en ese 2017. Y lo hizo en cuartos de final. Fui testigo del festejo de los fans en la orilla, en cómo lo cargaron y lo llevaron hasta la casa donde se estaba quedando. Sentir esa energía de la gente celebrando, estando ahí, en la arena con ellos, fue bravazo.
—— ABRO PARÉNTESIS PERUCHO ——
Cuando pienso en Pipeline, pienso también en ese tubazo de 10 puntos de Kelly del 2019. Ese no lo vi en vivo vivo. O sea, no desde la arena de Pipeline. Alaaaa te imaginas haberlo visto desde la playa…. Asuuuu! Pero no, estaba en Lima. En mi oficina, que queda en Chacarilla y me acuerdo mucho de ese momento. Lo estaba viendo en streaming, era la hora de almuerzo, así que era perfecto. O sea, siempre me las ingenio para ver los eventos sean a la hora que sean, sobre todo los heats de Kelly… de hecho los he visto desde mi cel, en reuniones, seminarios, en el auto y en miles de lugares más. Pero esa vez fue perfecta porque era hora de almuerzo, había poca gente en la ofi porque casi todos habían salido a almorzar fuera. Pero yo me había quedado para poder verlo desde mi laptop, tranquila. Así que estaba en mi cine privado. Mi amigo Jose Sistemas jajaja, se llama solo Jose, pero yo le dio Jose Sistemas porque trabaja en esa área (nada que ver), bueno, él estaba conmigo. Y como siempre, estaba bromeando acerca de mi “Slaterfanatismo”. Me veía nerviosa y preocupada, porque siempre me pongo así cuando corre Kelly. Y se burla pues jajaja. Y yo me río. Hasta que le dije que necesitaba estar sola para ver bien el heat. Y el heat era largaso porque estaban corriendo traslapados, así que duraba como 45 minutos, y eso quiere decir que había sufrimiento para rato… los fans sufrimos, claro que sí. Quién ha dicho que no? Y de la nada, llegó ese momento increíble y feliz!!! Kelly no tenía prioridad y el mar estaba tranqui en ese momento, faltaban como 10 minutos para el final creo. Y se empieza a formar esa pared típica de Pipeline y la ola la reman los dos: Kelly y Joan Duru. Por suerte, Duru se fue hacia Pipeline y Kelly hacia Backdoor. Y empezó esa travesía hermosa, larga y perfecta. Y yo solo decía en voz alta: “sal, sal, sal, sal”…escribo esto y me da risa porque me doy risa. Pero eso era lo que decía: “sal, sal, sal” jajaja. Y salió por la doggy door y fue increíble! Su celebración, su mirada al cielo, sus golpes a la tabla, la narración de Joe Turpel –quien me encanta-, los gritos que se escuchaban de la gente en la transmisión y bueno, los míos en Chacarilla. Pero tanta era mi emoción que no dimensioné el score. Y cuando a los pocos minutos todos los jueces le pusieron 10, logrando el puntaje perfecto fue… pajasaaaaaa. La felicidad total! Y mi amigo Jose Sistemas, no entendía mi emoción, ni mi alegría, ni mis gritos, ni nada. El solo se seguía burlando de mí jajaja.
El video de esa ola, de hecho lo tengo guardado en el escritorio de mi laptop. Y cada cierto tiempo lo veo. Cuando tengo un día en el que me siento con flojera o cuando no me siento bien por algo, lo veo. Me cambia el ánimo. En serio. Me pone feliz! Y también cada cierto tiempo lo publico en mi página de Instagram, con la intención de alegrarle el día a mis seguidores también.
Acá va video que le mando a Vasco por WA
La ola perfecta de Kelly. Video: WSL
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Y haciendo un forward con todo al día de hoy, pues sí, estoy muy emocionada porque este sábado empieza el Billabong Pro Pipeline. Sí, ahorita! Y mi mente ha traído a mí todos estos recuerdos increíbles de lo que fue vivir un Pipe Masters en vivo. Me acuerdo todo lo que viví estando allá, como si el 2017 hubiera sido ayer… y la emoción es aún mayor ahora, porque de hecho es una edición muy especial ya que tendremos a 2 peruanos compitiendo y eso lo hace mil veces más paja! Lucca, clasificado al CT y Miguel que está yendo como wildcard. Wow!!! Alucinante. Lucca corre con Kelly y Jack Robinson y Miguel con Italo y Callum Robson. Así que vamos con todo chicos. Tienen desde esta tribuna apoyo incondicional. Y no solo yo, todo el Perú vibrará en esta edición! Vamos que la hacemos!!! Verlos en el schedule con todos los grandes ya es un sueño hecho realidad. Y ahora quiero crear más recuerdos felices de esta ola, ya no solo con Kelly haciendo un tubazo de 10 puntos, o con John John saliendo campeón en su casa, o con los australianos armando un toldo a solo metritos de mí. Ahora toca vivir momentos y crear recuerdos con uds. como protagonistas…. Porque están ahí!!! Siiiii, están ahí!!!! Y eso hay que celebrarlo y disfrutarlo. Claro que sí! Cómo no! Uy, ya me dieron ganas… creo que me voy a abrir una chela para celebrar… no les provoca a uds. también?
Nos vemos, chau!
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