Leo Fioravanti se rompió la espalda en el 2015 corriendo Pipeline pero nunca había contado su versión de la historia. En su último video da una mirada a como fue que el accidente y cómo lo hizo superar un bloqueo mental para aprender lo más posible.
“Aprendí que no entras a divertirte o jugar, entras a posiblemente agarrar la mejor ola de tu vida pero estas tomando un riesgo bien grande”.
“Tienes que pagar para jugar. Yo solo tenía 17 años y pensaba que era invencible. Ese invierno me estaba agarrando varias olas, agarrando las cerradas e intentando de todo. Y luego vino el Volcom Pipe Pro, que era el primer QS del año, y en la primera ola que me agarre, estaba un poco tarde y el lip me cayo en la cabeza y mi cuerpo se fue directo al reef”.